Una postal campera

Las personas que por trabajo o por simple gusto tienen un gran contacto con el campo sabrán que estos espacios alejados de cualquier planta urbana saben regalar hermosas postales que merecen ser retratadas por quien puede apreciarlas.

Y si se tiene la posibilidad de contar con un teléfono celular que tenga una destacada calidad de imagen, las fotografías logradas pueden ser realmente bellas como la que hoy se expone en esta sección en la cual puede adivinarse la silueta de un jinete sobre su caballo disfrutando, juntos, de un atardecer primaveral en medio del silencio campestre. Se trata, simplemente, de saber apreciar la hermosura que nos rodea. Y, a partir de allí, aprovechar la tecnología con la que se cuenta para capturar ese momento, muchas veces irrepetible.