Un visitante nocturno

Suele ocurrir muchas veces que un perrito de la ciudad “pega onda” con algunos de nosotros. O bien nos sigue cuando nos encuentra caminando en alguna cuadra cualquiera o bien aparece por nuestro hogar en las más diversas ocasiones.

Por supuesto, esa aparición no es para nada desinteresada. Por el contrario, hay varias razones que la motivan. Por ejemplo, en el caso del hermoso ejemplar canino que aparece en imagen, está muy claro que él sólo aparece por la noche en un hogar de la ciudad cuando la familia ya dejó de cenar y, quizás, tenga alguna sobra que compartir.

Otros, quizás busquen algún refugio en los días de lluvia, o algo de sombra en los meses más duros del verano o algo de compañía que les proporcione unos cuántos minutos de mimos. Sin dudas, para muchos es sumamente grato recibir este tipo de visitas. Para otros no. Así es la vida.