Bomberos Voluntarios no detiene sus proyectos a pesar del complejo contexto económico a nivel país

Las obras y compras previstas se mantienen en pie

Al viento y la sequía, dos factores que suelen ser generadores de varios incendios en los campos del distrito y perjudican el trabajo del cuerpo activo al momento de sofocarlos, se suma el aumento en el precio del gasoil y la disparada del dólar. No obstante, se estudian presupuestos para realizar el campo de entrenamiento y fueron adquiridos tres nuevos móviles.

El contexto económico sumamente difícil por el que transita la Argentina ha hecho que muchas empresas e instituciones hayan suspendido momentáneamente algunas inversiones u obras proyectadas para este año, hasta que el panorama se estabilice. No es el caso de Bomberos Voluntarios de Trenque Lauquen, institución que, si bien se ve afectada por distintos factores económicos como la suba del dólar o los aumentos del gasoil, mantiene en pie importantes proyectos como lo son la obra del campo de entrenamiento que se llevará a cabo en un sector del predio ferroviario y la adquisición de nuevos móviles y equipamiento.

Así lo señaló a La Opinión el presidente de Bomberos Voluntarios, Juan Nappi, quien brindó un panorama de los trabajos planeados para este año. “Para la obra del campo de entrenamiento estamos hoy trabajando con todos los presupuestos: de alambrado, de mano de obra, de los árboles que tenemos que colocar alrededor del predio, los containers, entre otros. Pedimos presupuesto y debatimos en la reunión del Consejo Directivo, siempre buscando lo más económico y de mejor calidad”, expresó.

Complicado

En este marco, Nappi señaló que este contexto “complica todo porque varía todo”. “Por ejemplo, hay cosas que nosotros suprimimos, como por ejemplo dos módulos transportables que contenían los baños, pero por el costo que se elevó por la suba del dólar nos salió más barato hacer los baños de material. Entonces, todo lo que teníamos pensado que se iba a hacer más rápido, ahora va a ser más lento, pero más económico”, dijo antes de agregar: “Faltan dos o tres presupuestos porque hemos pedido mano de obra a muchos y, una vez que tengamos todos los presupuestos, se decidirá quiénes van a hacer las distintas partes de la obra y se iniciarán los trabajos”.

En el mismo sentido, comentó: “Yo vivo haciendo cuentas, el Consejo Directivo también y tenemos un tesorero que vive haciendo cuentas permanentemente. Siempre tenemos, para determinados gastos, determinada cuenta. La que nos vació la cuenta este año fue la del gasoil, el gran aumento que viene teniendo y la gran cantidad de salidas que venimos realizando. Por eso muchas veces a los productores les pedimos que nos devuelvan el gasoil para poder seguir asistiendo y no vaciar la caja que tenemos para ese tipo de gastos. En estos últimos quince días nos vació la caja de lo que veníamos teniendo para gastar. Eso fue un gran cachetazo al gasto del combustible”.

Respecto de las salidas, agregó: “Hemos tenido como tenemos todos los años, pero estas fueron mucho más profundas porque agarraron maíz en pie, soja en pie y los vientos que hemos tenido han dificultado el trabajo. Un incendio que puede resolverse en dos horas, ha requerido de seis, siete u ocho horas de trabajo. Por otro lado, la sequía ha hecho que cualquier cosita arda enseguida. Ese es el gran problema que hemos tenido. Hemos tenido que pedir colaboración a Bomberos Voluntarios de Tres Lomas, de 30 de Agosto, de nuestro destacamento de Beruti. Ha sido una ola de incendios de mucha magnitud por las largas horas de trabajo por la sequía y los vientos que hemos tenido”.

Agradecidos

No obstante, Nappi afirmó: “Nosotros no estamos mal gracias a la sociedad trenquelauquense. Por eso siempre agradecemos al pueblo lo que está haciendo con Bomberos y nosotros estamos más comprometidos que nunca cuidando el dinero que nos dan porque somos meros intermediarios entre la gente y la institución para sobrellevar todo esto de la mejor manera. A nosotros no nos va mal y por eso tenemos sueños que los vamos realizando de a poco”.

“Yo como bombero vivo enamorado de esta profesión y, por lo tanto, siempre supe que se podía hacer esto, máxime con la colaboración de la gente. Acabamos de comprar tres camiones, uno lo están embarcando esta semana y dos están siendo ploteados, pintados y adaptados para prestar el servicio en el cuartel”, informó el entrevistado.

En el mismo sentido, agregó: “Tuvimos la suerte de poder comprar en Europa con lo que veníamos juntando en la cuenta que tenemos para reequipamiento y nos alcanzó justito para el último camión que compramos. Antes de que aumentara el euro, nos alcanzó justo el subsidio y lo que veníamos juntando nosotros para comprar el último camión. Y esa inversión es la que a nosotros nos permite en el futuro estar preparados con todo lo que necesitamos. ¿Por qué tres camiones cisterna? Porque hoy no tenemos más agua en los campos, no hay más hectáreas porque es todo soja, no hay más animales y entonces no tenemos de dónde proveernos. Y cuando se demanda una importante cantidad de líquido para apagar un incendio tenemos que mandar camiones y camiones. Antes teníamos dos camiones grandes y ahora tenemos cuatro chicos que son más grandes y van y vienen más rápido”.