Acondicionamiento en el campanario de la Parroquia

Importante trabajo de altura

Además, también hay que hacer un trabajo de mantenimiento del sistema computarizado de las campanas, ligado al reloj, aunque en este caso se trata de una tarea más simple.

Esta semana se realizó un importante arreglo en el campanario de la Parroquia Nuestra Señora de los Dolores, que necesitaba reparaciones después de muchos años de funcionamiento.

“Desde hacía un tiempo las campanas estaban sonando menos porque tienen 23/24 años de puestas  y, obviamente, hay que hacer reparaciones, restauraciones de todo lo que es el andamiaje de los hierros, expuestos al frío, al calor, a la altura; se fueron oxidando; también los movimientos de las campanas, el peso, hacen que tengan su deterioro. Eso hizo que durante un tiempo tuviéramos que parar las campanas, que solamente se tocaban al mediodía; y no conseguíamos ni el turno ni la persona que lo pudiera hacer, porque es un trabajo en altura importante, y lo que se hizo ahora fue restaurar, volver a soldar, acomodar un poco todo lo que es la estructura metálica que rodea a las campanas, las estructura que las sostiene, incluso las cadenas que se mueven para que las campanas suenen”, explico el párroco Juan Pellegrino a La Opinión.

Además, el sacerdote señaló que también hay que hacer un trabajo de mantenimiento del sistema computarizado de las campanas, ligado al reloj, aunque en este caso se trata de una tarea más simple.

La labor más compleja ya se concretó en estos días, y por ese motivo, a partir del movimiento generado, principalmente por el trabajo de soldadura, es que por momentos se pudo escuchar el sonido de las campanas de la Parroquia en horarios no habituales, a media tarde por ejemplo.

Remodelación del templo

El Padre Juan agradeció y destacó que estas tareas “se hacen gracias a la colaboración de la gente que habitualmente está acompañando y ayudando”.

Por otro lado, adelantó que dentro de poco se va a comenzar con la segunda etapa de la gran obra de remodelación de la Parroquia y la Casa Parroquial para poder inaugurar el anunciado cinerario, por el cual hay que hacer una reforma en el templo.