A no comerse las uñas

Sin lugar a dudas, una buena manera para alejarse del mal hábito de comerse las uñas es esculpirlas. Porque el cambio es tan pintoresco y la mano queda tan bella y distinta que a todo el mundo le daría lástima comenzar a romperlas con los dientes.

En primer lugar, cabría explicar qué son las uñas esculpidas para que aquél que aún no lo sabe se entere. Como la palabra lo indica, lo que se hace es “esculpir” una uña artificial sobre la uña natural, fijándola con luz ultravioleta. Luego se puede esmaltar sobre dicha uña con esmalte común o semipermanente y aplicar diferentes tipos de diseños y/o decoraciones como bien se aprecia en la siguiente imagen. ¿Usted es de aquellos que se comen las uñas? Bien, ya sabe lo que tiene que hacer.